jueves, 29 de agosto de 2019
Tareas pendientes
Como quiera que el cierre de mi proyecto "N-301" y el comienzo, intenso, de "Arrabales" han monopolizado mi producción fotográfica estos últimos meses, y por aquello, de todos bien sabido, de que los hombres somos incapaces de hacer dos cosas a la vez, tengo un tanto abandonada mi faceta de fotógrafo de calle, disciplina a la que ya toca, de vez en cuando, volver. Mientras tanto, recupero y muestro algunas instantáneas del invierno pasado que giran en torno al fenómeno turístico y que esperaban turno para ser procesadas.
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Precisamente hoy leía en el grupo Full Frame en Facebook una reflexión de Francois Soulages en la que de alguna manera venía a decir que el fotógrafo necesita concederse un tiempo para alejarse del impulso de exponer, crear libros y atender proyectos para de esa forma enriquecerse.
ResponderEliminarPero mejor te lo copio entero y ya lo comentaremos.
Me gusta como miras a la calle, cómo te fijas en algunos pequeños detalles para incluirlos en tus fotos siempre alrededor de los personajes. Un abrazo chaval
“El fotógrafo/a actual comprenderá mejor la fotografía, tendrá una mejor aproximación a ella -más rica y revolucionaria- si abandona por un tiempo los circuitos tradicionales (exposiciones, concursos, fotolibros…): retirándose, trabajando sobre el hecho mismo de la acción fotográfica, poniéndose en contacto con otras cosas distintas a la fotografía, articulando su práctica con la de otras personas ajenas al mundo de la fotografía, el fotógrafo/a va a enriquecerse. La acción fotográfica no será ya una actividad orientada primero hacia la producción de imágenes sino una actividad donde se trabaja lo fotográfico, insistiendo más en las mediaciones que permiten producir imágenes que en las propias imágenes..”
“Hay que dar un rodeo para fotografiar mejor de otra manera y no repetir las mismas imágenes de publicidad, de moda, de reportaje, de arte.... La foto no debe ser un fin en sí mismo, lo que debe predominar es la acción fotográfica. Lo importante no es ya hacer fotos de gente sino trabajar con ellos la fotografía. La fotografía es casi un pretexto para tener una historia con la gente, en todo caso, sin esta historia, la foto no vale nada, ni estética ni existencialmente. Como apunta Pataut: Hago fotos para vivir, para interrogarme, para hablar”
Gracias Luis por tus palabras y por tomarte la molestia de compartir una interesante reflexión sobre el acto fotográfico, reflexión que debidamente matizada puede ser de ondudable utilidad. Un abrazo.
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